Cuando nos referimos al Design Thinking, en español “pensamiento de diseño” estamos evocando un estilo de vida. Más allá de su técnica y metodología, es un evento que está dominando la era en la que vivimos. Se trata de una forma muy poderosa para comunicar y entender un mensaje, desde un lugar empático y personal.
Todo lo que vemos y consumimos tiene detrás un proceso creativo en el que el diseño no puede ser excluido. Por ello es tan importante aprender a reconocerlo e implementarlo en tus negocios y vida diaria. Sí tienes un emprendimiento, ideas creativas a desarrollar o simplemente quieres entender y participar mejor en el mundo actual, quédate y aprende todo lo que necesitas sobre este método.
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Etapas del Design Thinking
El Design Thinking es una herramienta muy útil para que tus proyectos se destaquen. Tiene etapas muy sencillas de comprender, las cuales significan una gran evolución en dónde sea que las ejecutes.
Para aplicarlas siempre puedes ayudarte de herramientas digitales cómo plugins para WordPress, especialmente uno de los mas destacables cómo Yoast SEO .
Es importante recordar que este proceso no tiene que ser lineal. Al tratarse de un complejo creativo es importante permitir que se tus ideas se moldeen y cambien las veces suficientes, hasta lograr ese resultado exitoso.
A continuación te contamos en profundidad cada etapa .
1. Empatizar
Para un Design Thinking exitoso, es necesario entender al otro. Hablar de empatía significa pensar en las necesidades reales del consumidor. Mirar desde un lugar humano y conocer con verdad qué ocurre del otro lado del proyecto. Esta etapa es crucial para poder realizar todas las demás.
Puedes empezar a indagar en esto a través de preguntarte qué, cómo, por qué, para qué y dónde.
2. Definir
Partiendo de las necesidades del público con el que hemos empatizado, es hora de comenzar a definir. Se trata de establecer cuál es el problema. Es necesario para poder solucionarlo, entender por qué resulta importante e investigar distintos puntos de vista.
3. Idear
Esta es la parte más desafiante del Design Thinking. Representa el momento en el cual se empiezan a diseñar soluciones reales y plausibles. Es un momento donde la creatividad es la mayor ayuda.
Puedes utilizar referencias visitando páginas web antiguas. Lo esencial es usar todas las herramientas que tengas a tu servicio para poder encontrar e idear ese hallazgo que te diferencie.
4. Prototipar
Esto significa trasladar esa idea al plano de la realidad. Pensar en cómo puede ser llevada a cabo y cuáles son los recursos necesarios para que sea posible.
Debes tener en cuenta que muchas ideas no llegan a convertirse en prototipos, pero eso también es parte del proceso.
5. Testear
Lograr que el prototipo sea exitoso es posible mediante la etapa de testeo. Allí puedes corregir, agregar o eliminar conforme a las necesidades de tu audiencia.
Es muy importante pues en ella se define el alcance y la gestión final de tu proyecto. Sin embargo es necesario recordar que una buena idea constantemente se somete a todo este proceso.
Los tiempos cambian con mucha rapidez y lo mejor siempre será ir adaptando de forma auténtica todo lo que hagas. El Design Thinking es un excelente método para hacerlo.